Cambiar una llanta puede parecer una tarea intimidante, pero con estos 10 sencillos pasos, te aseguro que te convertirás en un experto en poco tiempo.
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Seguridad primero: Encuentra un lugar seguro para estacionar, lejos del tráfico. Enciende las luces de emergencia y utiliza triángulos de seguridad si los tienes.
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Prepara tus herramientas: Necesitarás un gato, una llave de tuercas y, por supuesto, la llanta de repuesto.
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Afloja las tuercas: Antes de levantar el coche, afloja las tuercas de la llanta dañada. No las quites completamente aún.
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Levanta el coche: Usa el gato para levantar el coche hasta que la llanta esté a unos centímetros del suelo.
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Quita las tuercas: Ahora puedes quitar completamente las tuercas.
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Cambia la llanta: Retira la llanta dañada y coloca la de repuesto en su lugar.
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Coloca las tuercas: Vuelve a colocar las tuercas pero no las aprietes del todo.
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Baja el coche: Usa el gato para bajar el coche hasta que la llanta de repuesto toque el suelo.
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Aprieta las tuercas: Ahora puedes apretar completamente las tuercas.
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Verifica: Asegúrate de que la llanta esté bien asegurada y lista para rodar.
Y así, en 10 pasos simples, has cambiado tu llanta. Recuerda siempre tener un kit de herramientas en tu coche para estas situaciones. ¡Buena suerte en la carretera!